Desde muy pequeña he estado rodeada por materiales de pintura. Mi madre, mujer creativa, siempre creando, construyendo y modificando lo construido, nos educó envueltas en tintas y papeles de distintas texturas y colores.
Mirando hacia atrás, a la ventana de lo que ya ocurrió, encontramos tres generaciones de mujeres pintoras: mi bisabuela, mi abuela y mi madre, como si fuera un secreto transportado por el tiempo.
Moviéndome en contra de mis propias capacidades, decidí apresurarme para tomar el secreto entre las manos y comenzar a crear. Me fue cedido un estuche de acuarelas (después de una búsqueda en la que aparecieron un gran número de opciones pertenecientes a las tres generaciones), pinceles, un trapito y varios consejos.
Abro mi cuaderno para acuarelas (regalo navideño) y me encuentro con el tremendo vértigo de la hoja en blanco, espacio insoportable que se convierte en un temor profundo para los menos creativos. ¿De dónde agarrarse para no caer? ¿Qué línea será la que evite mi hundimiento en el vacío que está frente a mí?
Mirando hacia atrás, a la ventana de lo que ya ocurrió, encontramos tres generaciones de mujeres pintoras: mi bisabuela, mi abuela y mi madre, como si fuera un secreto transportado por el tiempo.
Moviéndome en contra de mis propias capacidades, decidí apresurarme para tomar el secreto entre las manos y comenzar a crear. Me fue cedido un estuche de acuarelas (después de una búsqueda en la que aparecieron un gran número de opciones pertenecientes a las tres generaciones), pinceles, un trapito y varios consejos.
Abro mi cuaderno para acuarelas (regalo navideño) y me encuentro con el tremendo vértigo de la hoja en blanco, espacio insoportable que se convierte en un temor profundo para los menos creativos. ¿De dónde agarrarse para no caer? ¿Qué línea será la que evite mi hundimiento en el vacío que está frente a mí?
2 comentarios:
wow, El blog de Isabel
ya te agrego a mis contactos
un saludo
Iván
Ese delgado pero potente hilo que va hilvanando generación tras generación momentos creativos y sensibilidades manifiestas ha llegado hasta ti como una herencia preciosa y
e invaluable que sólo tu sabrás aquilatar y aprovechar como se debe.
Yo he sido testigo de ese hilo en las cuatro generaciones que se cumplen en tu persona y estoy seguro que el terror con el que te enfrentas ante un lienzo en blanco lo superarás airosa y cretivamente como las mujeres de tu familia lo han superado años y años antes de que tu nacieras.
Felicidades y buen hacer en tu andar, que con lo cabalgado por tus antecesoras seguro siempre llegarás a un buen puerto.
Te quiere mucho
Alfredín pim pim
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